martes, 31 de mayo de 2011

LADILLAS

Conocida así mismo con el nombre científico de phthirus pubis, son unos insectos parasitarios amarillentos, de unos dos milímetros de largo, que viven en las partes vellosas del cuerpo (pubis, axilas) donde se agarran por medio de las pinzas con que terminan sus patas. Chupan la sangre y ponen sus huevos en Las raíces del vello. Producen ´picaduras que provocan molestos picores. Pueden contraerse mediante el contacto sexual directo con una persona que tengan la infección o por compartir las mismas toallas o sábanas. Se eliminan con facilidad aplicando sobre la zona afectada un insecticida de venta en farmacias. no obstante, si tras aplicar este tratamiento, la infección persiste debe ser atendida por un especialista

CÁNDIDAS


Las candidiasis constituyen un grupo de infecciones causadas por un hongo oportunista del género Cándida, de los cuales Cándida albicans es la más frecuente. Pueden producir una infección clínica en prácticamente en cualquier sistema orgánico. El espectro de infecciones abarca desde la enfermedad mucosa y cutánea superficial hasta la diseminación hematógena extensa con afectación de órganos diana como el hígado, bazo, riñón, corazón y cerebro. En la mujer, la mucosa vaginal también constituye un lugar frecuente de infección. Se puede transmitir por ropas, objetos y también por contacto sexual (véase infección de transmisión sexual). Estos hongos están siempre presentes en la piel y en la mucosa del tracto digestivo, genitourinario y respiratorio de la mayoría de las personas, pero se encuentran controlados por otros microorganismos no patógenos. Cuando se produce un desequilibrio, el aumento desmedido de la población de hongos produce esta u otras micosis.   
    
Tienen en común con las tricomonas un nombre a primera vista inofensivo. Otras semejanzas estriban en que afectan principalmente al sexo femenino y que el hombre suele ser portador  asintomático. Pero en esta ocasión, no se trata de un protozoo si no de un hongo que se asienta en las mucosas húmedas y calientes. La via de contagio es diversa. Relaciones sexuales, ropas, objetos, etc. 

TRICHOMA VAGINALIS

Trichomonas vaginalis es un protozoo patógeno flagelado perteneciente al orden Trichomonadida que parasita el tracto urogenital tanto de hombres como de mujeres, pero únicamente en humanos. Produce una patología denominada tricomoniasis urogenital.

Secreción  vaginal espumosa de aspecto amarillento y un olor muy fuerte, picor e irritación, son sus principales signos. Actualmente existen tratamientos muy eficaces, que debe ser llevados a cabo por ambos miembros de la pareja Diagnóstico

Se ha de tomar una pequeña muestra del flujo sospechoso colocándose en una gota de suero fisiológico sobre un portaobjetos (cristal) y se cubre con una delgada lámina de cristal. Se observa bajo el microscopio a 60 aumentos. Si existen estos parásitos se les verá moverse ágilmente de un lado para otro. También se observará que parasitan algunas células epiteliales, usualmente en grupos.

En la preparación citológica con la tinción de Papanicolau. Se observan estos parásitos de forma alargada, ya sea aisladamente ó agrupados en forma de corona parasitando las células epiteliales, tal como se muestra en la siguiente imagen. En este caso, además de las tricomonas, se puede apreciar una infección por Gardnerellas vaginalis



Tratamiento

Las irrigaciones vaginales de agua con sal las destruye rápidamente (Aprox. 4 cucharadas
de sal por litro). Pero, desgraciadamente, la solución salina no llega a los reservorios de las glándulas de moco del cérvix. Estas irrigaciones deben hacerse todos los días durante unos 14 días, al mismo tiempo que se administra la medicación sistémica
.
Metronidazol.

Esta medicación no debe usarse en los primeros meses de gestación por la posibilidad de producir malformaciones. No se debe tomar alcohol, durante el tratamiento por el efecto antabus del medicamento.

Dosis recomendadas: 500 mg dos veces por día durante 14 días, es la más adecuada.
Dosis recomendada: 1.000 mg día durante 7 días.
La dosis única de 2.000 mg es menos efectiva y tiene muchas recidivas.
Siempre debe tratarse a la pareja

Algunas veces el parásito es resistente a las dosis habituales de Metronidazol, por lo que debe comprobarse la eficacia del tratamiento a la semana de terminar las dosis recomendadas.

CLAMIDIA

Esta infección se debe a la bacteria chlamydia trachomatis, que se transmite por contacto con las mucosas vaginales, uretra, recto, boca y ojos, afectando a la uretra en los hombres {uretritis} y al cuello uterino en las mujeres {cervicitis}. Sus síntomas son más evidentes en el hombre que en la mujer, aunque no siempre resultan fáciles de descubrir.se confunde en ocasiones con los de la gonorrea, y son, principalmente. Secreción vaginal y dolor en la parte inferior del vientre en las mujeres, en el hombre, inicialmente aparecen secreciones, transparentes que se vuelven luego cremosas, así como muchas ganas de orinar y dolor. Se cura siguiendo un tratamiento específico con antibióticos si no se atiende a tiempo, la infección puede progresar y provocar esterilidad tanto en los hombres como en las mujeres.

SIFILIS

Antiguamente, era considerada la enfermedad de transmisión sexual más peligrosa, hasta que el descubrimiento de la penicilina por Alexander Fleming en 1928 se convirtió en un tratamiento eficaz para controlarla. Esta causada por una bacteria llamada treponema pallidum. La vía principal de transmisión es el contacto sexual, pero también puede contagiarla la madre al feto durante el embarazo, a través de la placenta.
Evoluciona en tres etapas. En la primera, pocas semanas después del contagio, aparecen unas pequeñas ulceras rojizas (chancro sifilítico) en la zona en donde se a producido el contacto (genitales, ano, boca) las lesiones desaparecen poco después. Unos meses más tarde, los treponemas se extienden a través de la sangre por todo el organismo, dando lugar diversas lesiones generalizadas: manchas en la piel, ganglios inflamados, fiebre, dolor de garganta pérdida de apetito y malestar general. Estos síntomas pueden desaparecer incluso sin tratamiento, pero la enfermedad sigue latente. Años después del contacto, la enfermedad continua la fase latente durante un largo periodo de tiempo. Si no se aplica un tratamiento pueden producirse: ulceras en la piel y órganos internos; inflamación de las articulaciones; lesiones de corazón, hígado y sistema nervioso central. Hemos dicho que la sífilis se elimina con antibióticos. No obstante si no se actúa rápidamente para curarla existe el riesgo de que las lesiones producidas sean ya irreversibles, cuando se aplique el tratamiento.

lunes, 30 de mayo de 2011

HERPES GENITAL

El virus responsable de esta infección es uno de los más difundidos entre los seres a través del contacto con las manos. Úlceras, picazón, fuertes dolores localizados en los genitales, escozor al orinar, fiebre y malestar similar al de la gripe, son los principales síntomas. Si no se trata debidamente, puede propiciar el riesgo  de contraer diversas enfermedades. Como todas las dolencias de origen vírico, su tratamiento suele ser tediosos en algunos casos. Además existe la probabilidad de reaparición de los síntomas, especialmente en situaciones de estrés. En caso de embarazo, es necesario mantener un control estricto para evitar daños irreversibles en el niño.

LA GONORREA O GONOCOCIA

Esta producida por le gonococo, u microorganismo que se encuentra preferentemente en solas templadas y húmedas del cuerpo (el conducto urinario y el cuello uterino sobre todo) es una enfermedad venérea, es decir, solo se transmite a través del contacto sexual directo y no se contagia mediante toallas, baños públicos, piscinas, etc. Hay que estar alerta si se observan los siguientes síntomas: secreción purulenta amarillenta por el pene, sensación de escozor al orinar, aumento del flujo vaginal, dolores abdominales o cansancio. Tiene un tratamiento sencillo y efectivo a base de antibióticos, pero si no se cura a tiempo, la infección puede extenderse a otros órganos y ocasionar consecuencias graves, como la esterilidad.